EL DOLOR ES INEVITABLE, EL SUFRIMIENTO OPCIONAL
EL dolor es inevitable, el sufrimiento opcional. La capacidad de resistir el dolor y reponerse a situaciones desfavorables nos hace fuertes, resistentes. Pero la connotación «dolor», no deja de ser una experiencia negativa. Cuando hay dolor físico, el cuerpo está gritando algo. Cuando el dolor es emocional, es el alma quien está chillando. Tan sencillo como escuchar al cuerpo. Escucharnos desde el silencio, para tratar de entender lo que ese dolor viene a decirnos. La resiliencia solo tiene sentido cuando AVANZAMOS Y CRECEMOS a través del dolor, no solo cuando nos sobreponemos a El a costa de mucho sufrimiento.
En el artículo se esta semana, voy a hablarte del dolor, por que el dolor es inevitable, el sufrimiento opcional. También te hablaré del sufrimiento y de la parte más positiva de ambos. Sin duda, debemos aprender a mirar el dolor y el sufrimiento desde su parte de aprendizaje, por que … ¡ De algo tiene que servir, a veces, tanto dolor !
Vamos a diferenciar entre dolor, que generalmente se asocia a algo físico, y sufrimiento, que se relaciona más con aspectos emocionales.
El dolor puede ser inevitable, después de un golpe, una caída, una operación, generalmente hay una respuesta fisiológica derivada de la reacción de nuestras células a un estimulo. Se quejan y nos hacen saber que están molestas por lo que acaba de pasar, es ahí cuando aparece el dolor.
Ya os adelanto que a veces la vida es caprichosa y un tanto impertinente. Generalmente, cuando nos damos un golpe, es la propia vida la que nos acaba de parar para alertarnos de algo. Sea que vamos despistados, sea que estamos desconcentrados, pero los golpes fortuitos suelen llegar en momentos en los que, vale la pena pararnos y averiguar que estábamos pensando JUSTO en ese momento.
Los golpes llegan en momentos curiosos. La vida te para y te hace tomar conciencia del momento presente.
Aquí te dejo una pista curiosa. Cuando te des un golpe, párate y reflexiona…. ¿Que estabas pensando en ese mismo instante?
El sufrimiento, en cambio, es opcional. Ahora se que habrás hecho alguna mueca y habrás pensado… Si claro !! Vamos… Que a mi me gusta sufrir !!….
Me vas a perdonar… Pues si ! Rotundamente si.
A veces, regozijarnos en el sufrimiento literalmente «nos pone». Dar un poquito de pena, que estén por nosotros un rato, dar a entender que nosotros somos los que lo estamos pasando peor, es alimento para el Ego herido. Estamos en una sociedad que se lo pasa en grande cuando, y perdonadme la expresión, se remueve en su propia mierda. Nos gusta ese punto de lloriqueo infantil que a veces tenemos de adultos para consolar nuestros más profundos miedos… miedo a no ser querido, a no ser importante para alguien, a no merecer.
Pero es ahí, donde hay que echarle un par de narices, tragar saliva, coger impulso, entender y aceptar para continuar.
Por que cuando el dolor se instala en nosotros, el sufrimiento no tarda en aparecer.
Dicen que la única emoción que NO es verdadera es el sufrimiento. Etimológicamente la palabra sufrimiento se divide en Sufri y miento. O lo que viene a ser lo mismo, «La mentira del sufrimiento». El sufrimiento, es una emoción que inventa la mente, para dar constancia a ese dolor vivido pero entrando en una fase más aguda e incluso más grave. Cuando el sufrimiento se instala en nosotros, toda la vida parece que gire en torno a eso que está pasando, nuestro ánimo se resiente, nuestra vida toma un cáliz negativo, parece que poco a poco perdemos luz en el camino.
Pero … ¿El sufrimiento, tiene cura?.
Por supuesto que si. Pero solo tiene una condición, sin ella no podrías salirte …. ¿Quieres saber cuál es?….
¡ QUERER SALIR DE ESA SITUACION !
No creas que es fácil, a veces nuestra zona de confort nos empuja a preferir quejarnos y lamentarnos que luchar por cambiar.
Te voy a dar otro truco … Hoy no vas a irte de este artículo indiferente … Si prefieres quedarte en tu zona de confort, no seré yo quién te diga y te confirme que SOLO SI ACEPTAS quedarte ahí de buen grado y reajustar algunas cosas en tu vida ( si es que crees que esa es tu opción), insisto, solo si ACEPTAS lo que te está pasando, lograrás ganarle la batalla al sufrimiento, sino, quedarás condenado de por vida a una insatisfacción constante que hará de ti un o una sufridora hasta el final de tus días.
Salir de la zona de confort no solo debe ser tomar la decisión de romper con tu vida para dejar de sufrir, salir de tu zona de confort puede que sea el renacer y reinventarte, aceptando que algunas cosas no puedes cambiarlas, solo puedes cambiarte a ti mism@ para dejar de sufrir.