PERDONARNOS ES NECESARIO
Perdonarnos es necesario, por no decir imprescindible. ¿Cuántas veces nos hemos castigado por algo que hemos o hemos dejado de hacer? Estoy segura, que si estás leyendo esto, estarás pensando ¡Tiene razón! o tal vez, estés asistiendo con la cabeza…
La primera vez que oí que perdonarnos era necesario, pensé ¿Y porqué? Pues simplemente porque, todas nuestras acciones tienen una consecuencia, para bien o para mal, para nosotros o para terceras personas. Se llama Ley Universal de causa y efecto. Os voy a contar un secreto, cuando me sucede algo que no espero, a veces no suelo reaccionar, es como si me bloqueara, pero cuando pasa ese momento, entonces muchas veces pienso: «pues podría haber dicho esto o lo otro» o «tendría que haber reaccionado de otra manera porque no era para tanto», pero tanto la una como la otra, ya forman parte del pasado. Un pasado al que solo puedo perdonar.
Curiosamente, casi todos tenemos algo que perdonarnos y, perdonarnos, es ABSOLUTAMENTE necesario para avanzar, para soltar lastre, peso emocional, como os decía en el anterior post. Si no nos perdonamos, esa carga, la vamos a arrastrar. ¿Durante cuánto tiempo? Si no lo analizas, si no te perdonas, lamento decirtelo …. durante el resto de tu vida.
Hay una frase que me encanta y que reza así «renovarse o morir» y yo la adaptaría a «perdonarse o morir». Y no me refiero a morir literalmente, sinó a no levantar cabeza.
Y tú, que ahora mismo estás leyendo esto, te preguntarás y ¿Eso cómo se hace? Pues con trabajo personal y mucho AMOR por ti mismo@, como todo en esta vida. Pero en esta ocasión, de un trabajo interior muy intenso.
Hay un capítulo de mi libro «El secreto de la Felicidad» dedicado a cómo trascender el perdón, perdonar el pasado para poder continuar.
Si quieres puedes descargártelo en este link.
Cuando tenemos claro que perdonarnos es necesario, empieza una etapa de tratar de entender lo que pasó, por qué pasó lo que pasó y que tuve yo que aprender de aquello.
Acabo de darte tres claves para conseguir TU propio perdón :
1.- Entender lo que pasó,
2.- Para qué pasó lo que pasó y
3.- ¿Qué tuve yo que aprender de aquello?
y si lo hacemos, se abren infinitas oportunidades. Oportunidades que tal vez habías dejado pasar, víctima de un pasado que a veces, te incapacitaba para avanzar.
Solemos perdonar a los demás, por mucho daño que nos hayan hecho, con mucha más facilidad que a nosotros mismos, pero ¿Porqué no nos damos esa oportunidad? ¿porqué parece tan ardua tarea, cuando es tan fácil? ¿ porqué nos castigamos?
Las creencias tienen que ver mucho en todo este asunto del perdón. Y no hablo de las creencias religiosas solamente, en este caso, las religiosas y las educacionales han marcado como un estigma nuestra respuesta antes de poder perdonarnos. Para perdonarse, parece que debamos pagar penitencia. ¿No es eso lo que nos han enseñado desde pequeños?. Si haces algo mal, Dios te castigará. Si eres malo, recibirás una regañina, si no haces caso, te encerraremos en la habitación sin salir …. y un sinfín de frases, que lejos de enseñarnos a ser mejores, nos sumergían en una pataleta de ira y odio, que HOY en día, en muchos casos, es nuestra respuesta natural a algunos acontecimientos de nuestra vida. Seguimos pataleando, odiando y llenándonos de ira.
Vamos a pasar a la parte práctica. Como perdonar.
Piensa en algo que te hayan hecho. Puede haber sido hace mucho o no, eso da igual. Se trata de que respondas a las preguntas que te hice arriba. Ahora. Háztelas.
Analicemos otro caso. Algo que sí conseguiste perdonar ya. Pregúntate:
¿Me costó perdonar?
¿ Cómo cambió mi vida cuando conseguí perdonar?
¿qué ha cambiado en mi desde ese momento ?
Reflexiona. ¿ Crees que puedes contestar de nuevo las tres preguntas? . ¡ Seguro que sí !
Ahora piensa en algo que no te has perdonado. Pregúntate:
¿porqué no perdono?
¿qué me impide perdonarme o perdonar ?
¿sientes que hay algo detrás de lo que te inculcaron cuando eras pequeñ@?
Aquí te dejo la parte, de la cual solo TU eres responsable, perdonarte o no.Ver, si realmente crees que debes flagelarte por ello toda la vida, o bien, tomar conciencia, aceptar y continuar tu camino.
Recuerda, el poder lo tienes tú, y las decisiones que tomas en tu vida, son tuyas. Para bien o para mal el daño de no perdonarte será solo para ti.
Si crees que necesitas que te eche una mano en este tema del perdón no dudes en envíarme un e-mail. o ponerte en contacto conmigo a través de mi página web, donde encontrarás muchos más artículos de tu interés.
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